lunes, 25 de octubre de 2010

EL ALJARAFE. MUNDO ANTIGUO

Algunos historiadores especialistas en el mundo antiguo defienden la tesis de que fue en la Comarca del Aljarafe donde se asentaron los primeros pobladores de Andalucía. Esta es una afirmación algo arriesgada  teniendo en cuenta, primero, la longitud que posee Andalucía, y segundo que es sabido, que fue en la “tacita de plata”, es decir, en Cádiz, donde desembarcaron los fenicios y su posterior asentamiento tartésico, cuya población, hoy en día, sigue siendo un misterio.
Al margen de todo ello, no cabe duda que ya hubo pobladores en las tierras del Aljarafe desde época paleolítica; ahí quedan, por ejemplo, los dólmenes funerarios de la Pastora o Matarrubilla, en Valencina de la Concepción; el poblado supuestamente tarteso en Camas, donde apareció el famoso tesoro del Carambolo, y los numerosos restos arqueológicos de población antigua que han aparecido en las extensas tierras aljarafeña.
Fueron los romanos los que bautizaron el Aljarafe como la Huerta de Hércules; siendo el geógrafo griego Estrabón el que ratificó esta aseveración, pues estaba convencido que fue este personaje el que plantó sus olivos. Tal fue la impresión que se llevó el citado geógrafo cuando, desde las alturas de sus cerros, contempló un “mar de olivos” que se perdía en el horizonte. Asimismo se hace eco del relato de un navegante que había remontado el río Guadalquivir hasta Córdoba. A su izquierda observa que la ribera está muy poblada, los campos cultivados con esmero y los bosques y otras plantaciones contribuyen a amenizar el paisaje. Más adelante enumera este geógrafo los productos que más se comercializaban, como son: el trigo, el vino y el aceite; siendo este último producto el más apreciado en la Roma Imperial.
Pero fueron los árabes los que bautizaron estas tierras tal y como se conoce hoy en día, traduciéndose el nombre de “Aljarafe” como lugar elevado, cuyo clima fue elogiado desde tiempo inmemorial, caracterizado por ser, tanto en verano como en invierno, de temperaturas suaves, en el que se produce un microclima característico que difiere con el que se da en la capital hispalense.
Tanto por su clima, por la fertilidad de su tierra, como por algo tan fundamental para la vida como es el agua, fue lo que hizo que se iniciase una población permanente, primero mediante fundus, en época romana, y después con poblaciones más consolidadas en época musulmana.
Un viajero del siglo XII, ax-Xaqudi, visitó los lugares del Aljarafe y lo describió expresando que, “Los pueblos del Aljarafe superan a los de cualquier otra parte por el gusto de sus casas y el cuidado que ponen en ellas sus habitantes, de al modo que, con sus paredes de cal son como estrellas blancas en un cielo de olivos verdes. Están bordeados de almunias, quintas y de todo un manto verde, huertos y floridas orillas, diluyendo en el aire los trinos de toda clase de pájaros. En su ribera se levantan fincas de recreo y torres que se alumbran para mejor navegación de las barcas de recreo, pesca o de otra condición”.

viernes, 22 de octubre de 2010

EL ALJARAFE, PARAÍSO SEVILLANO. ORIGEN GEOLÓGICO.

El Aljarafe cuenta con una cuarta parte de los municipios de la provincia de Sevilla, ocupando, aproximadamente, el 3% de toda la superficie.
Esta Comarca se encuentra asentada entre las zonas de Sierra Morena, al norte y otras de Marismas, al sur; limitando hacia el este con la ribera del Guadalquivir, y hacia el oeste con los antiguos campos de Tejada y el Condado de Niebla.
Su origen geológico es del Terciario, consecuencia del accidente tectónico de “la falla del Guadalquivir”, la cual ha condicionado el escarpe del Aljarafe y el trazado general Norte-Sur del río, produciendo elevaciones y descensos que conforman el relieve de este lugar.
La zona más elevada corresponde a los términos de Sanlúcar la Mayor, Olivares y Albaida. A partir de aquí, comienza a descender hacia el sur entre los ríos Guadalquivir y Guadiamar. Asimismo tenemos las elevaciones de Castilleja de la Cuesta, San Juan de Aznalfarache y Gelves, que hacen frontera entre el cauce del río y las tierras del interior.
Hace aproximadamente unos 5.000 años, el Guadalquivir desembocaba en un amplio estuario o delta a la altura de Santiponce –según el profesor Escacena Carrasco-; y cerca de Coria del Río, -según la versión del geólogo Fernando Rambaud-. A este estuario los romanos lo bautizaron Lacus Ligustin.

La tierra que compone el suelo de esta Comarca está formada por sedimentos acumulados y subdivididos en los períodos del Mioceno Medio (hace unos 15 millones de años), y el período Pliocénico (unos 5 millones de años), encuadrados en la Era Terciaria; encontrándose su localización tanto en su cornisa como en una zona de transición del escarpe montañoso, como es la ladera de los montes. También tenemos depósitos de un período más reciente, en la Era Cuaternaria, comprendiendo el Pleistoceno y el Holoceno, de aproximadamente 1,8 millones de años. Estos sedimentos son los depositados en la vega o llanura del Guadalquivir y como consecuencia de los aportes proporcionados por el río.
 Son sus pueblos: Albaída del Aljarafe, Almensilla, Benacazón, Bollullos de la Mitación, Bormujos, Carrión de los Céspedes, las tres Castillejas (de Guzmán, de la Cuesta, y del Campo), Espetias, Gínes, Huévar, Mairena del Aljarafe, Olivares, Pilas, Salteras, Sanlúcar la Mayor, Tomares, Umbrete, Valencina de la Concepción, y Villanueva del Ariscal.
Por otra parte tenemos los pueblos que conforman su ribera, como son: Santiponce, Camas, San Juan de Aznalfarache, Gelves, Coria del Río, y La Puebla del Río.

jueves, 14 de octubre de 2010

NOTICIAS HISTÓRICAS Y DE ACTUALIDAD DEL ALJARAFE

Este Blog que hoy se presenta pretende resaltar toda la información, tanto histórica como de actualidad, relacionadas con los pueblos del Aljarafe.

La existencia de esta Comarca se pierde en la noche de los tiempos. Fueron muchos los pueblos antiguos que se asentaron en su territorio, algunos estaban de paso, mientras que otros permanecieron en él configurando la historia del lugar y aportando su cultura y tradiciones, creándose así una idiosincrasia que los diferencian de otros asentamientos humanos.

Según los historiadores, existe en este extenso territorio indicios de asentamientos humanos desde el Paleolítico Inferior. Dichos pobladores descubrieron en estas tierras los recursos necesarios para su subsistencia. Era un territorio salvaje, inhóspito, pero a la vez atrayente por lo benigno de su clima, por la fertilidad de sus tierras, y por el estuario del Guadalquivir que llegaba hasta, según algunos historiadores, las mismas puertas de la actual Santiponce, y otros nos indican que llegaba hasta la localidad ribereña de Gelves. De hecho, en este úlitmo lugar, en su cerro del Cañuelo se encontraron, hace años, fósiles de moluscos que habitan en el mar.

En definitiva, lo que se intenta con este blog es hacer más accesible la Comarca del Aljarafe, tanto a los vecinos cuyos ancestros llevan viviendo en estas tierras desde tiempo inmemorial, como a los foráneos que la pisan por primera vez y tienen inquietud por conocer sus secretos.